La ONU lanza una campaña para ayudar a los refugiados durante el invierno.
El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados lanza este lunes una campaña para ayudar a los refugiados y desplazados durante el invierno que, debido a los recortes en la financiación de la ayuda humanitaria, afrontarán el frío sin protección.
El organismo de la ONU (ACNUR) ha advertido de que millones de refugiados y desplazados internos ya están sufriendo los efectos del descenso de las temperaturas y se enfrentarán a duros inviernos sin la ayuda suficiente.
“Ante el descenso de las temperaturas en muchas regiones, millones de refugiados y desplazados internos se enfrentan a un duro invierno con mucha menos asistencia, debido a la fuerte disminución de la ayuda humanitaria ”, subrayó ACNUR.
“Muchos se quedarán prácticamente sin nada para protegerse del intenso frío”, dijo Dominique Hyde, directora de Relaciones Externas del ACNUR, quien regresó recientemente de Siria y Jordania.
“ Los presupuestos humanitarios están al límite y el apoyo ofrecido [por ACNUR] este invierno será mucho menor ”, dijo, y agregó que muchas “familias tendrán que soportar temperaturas bajo cero sin cosas que muchos dan por sentadas: refugio adecuado, aislamiento térmico, calefacción, mantas, ropa de abrigo o medicamentos”.
ACNUR, si bien afirmó que este es uno de los eventos de recaudación de fondos más importantes de la agencia, señaló que varios gobiernos han reducido la ayuda humanitaria proporcionada por las agencias de derechos humanos para 2025.
“ Es más importante que nunca que los donantes privados e individuales se movilicen para salvar vidas en un momento en que las temperaturas están cayendo en picado ”, recalcó, añadiendo que tiene la intención de recaudar al menos 35 millones de dólares (unos 30 millones de euros) para ayudar a aislar y reparar viviendas bombardeadas, proporcionar calefacción y mantas a niños y ancianos, y proporcionar fondos para la compra de medicamentos y alimentos calientes.
El organismo de la ONU destacó algunas de las zonas del mundo que más preocupan a los equipos de ayuda humanitaria, añadiendo que, en muchos casos, unas pocas decenas de dólares marcan la diferencia para las familias afectadas.
En Oriente Medio, la situación sigue siendo extremadamente frágil, señaló ACNUR, indicando, por ejemplo, que más de un millón de sirios lograron regresar al país tras la caída del régimen de Bashar al-Assad a finales del año pasado, pero muchos encontraron sus hogares destruidos por años de guerra y combates.
“ Las familias más vulnerables se enfrentan al frío sin nada con qué protegerse ”, afirmaron activistas del ACNUR, quienes estiman que los recortes de financiación dejarán a 750.000 personas sin apoyo vital, incluyendo mantas, colchones, utensilios de cocina, lámparas solares y ropa de invierno, durante la temporada de frío.
En Afganistán, la situación es alarmante y las temperaturas bajo cero ya están dejando a muchas familias expuestas.
“ Nueve de cada diez afganos viven en la pobreza, incluso después del fin de más de cuatro décadas de conflicto ”, ya que el país todavía enfrenta “una crisis económica, un desempleo creciente y servicios públicos y sistemas de apoyo social sobrecargados”, describió la ONU.
“Más de 2,2 millones de afganos han regresado este año de Pakistán e Irán en condiciones extremadamente difíciles: con las manos vacías y con pocas perspectivas”, dijo la organización, señalando que algunos nunca habían pisado Afganistán antes.
Además, dos devastadores terremotos registrados en los últimos meses han dejado a las familias aún más vulnerables a las inclemencias del tiempo.
Ucrania también preocupa al ACNUR, que atraviesa el cuarto invierno de guerra a gran escala para millones de personas en el país, incluidas las personas desplazadas internamente.
“ Las necesidades humanitarias siguen aumentando a medida que se intensifican los ataques , que se cobran vidas civiles y destruyen infraestructura, exacerbando de forma acumulativa las interrupciones en el suministro de gas, electricidad y agua”, advirtió la agencia, subrayando que las temperaturas descenderán rápidamente a -20 °C.
Al argumentar que "las familias desplazadas no deberían tener que afrontar el invierno solas", Dominique Hyde señaló que los equipos de la organización están sobre el terreno, decididos a proteger a los refugiados del frío, pero que se están quedando sin tiempo y recursos.
" Necesitamos más financiación para ayudar a que la vida sea un poco más llevadera para muchas personas ", suplicó.
La reducción de la financiación para la ayuda humanitaria se ha notado desde marzo, cuando el presidente estadounidense Donald Trump decidió recortar la inversión en la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), alegando fraude y malversación de recursos.
El secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, afirmó que más del 80% de los programas de USAID ya han sido cancelados.
Según un estudio publicado en julio por la revista científica The Lancet , se espera que la decisión provoque más de 14 millones de muertes prematuras para 2030, un tercio de las cuales —es decir, más de 4,5 millones (700.000 por año)— serán niños menores de 5 años.
Para los países más pobres, y según el estudio, las consecuencias de esta decisión "son comparables, en magnitud, a una pandemia mundial o a un gran conflicto armado".
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