Esta ciudad es muy poco acogedora para los turistas; se encuentra a 1 hora y 30 minutos de París.
Al viajar, más allá de la belleza de los monumentos o la riqueza cultural, la hospitalidad de los lugareños es un elemento crucial de la experiencia. Mediante una encuesta a más de 12.500 expatriados en todo el mundo, el estudio anual de InterNations ha elaborado una clasificación de las ciudades más y menos acogedoras del planeta. El resultado: una metrópolis europea destaca por su extrema frialdad…
Según sus nuevos residentes, esta ciudad europea, lamentablemente, no destaca por su hospitalidad. En cuanto a la acogida, el 46% de los expatriados encuestados tenía una opinión negativa (frente al 20% a nivel mundial). No sorprende que quedara en los últimos puestos del ranking de InterNations, la mayor red mundial de expatriados.
Esta ciudad es Múnich, la capital bávara de Alemania, a la que se puede llegar en 1 hora y 30 minutos en vuelo directo desde París. «Es difícil entablar amistad con los locales», afirma un expatriado italiano. Al preguntarles sobre sus relaciones, el 54 % de los expatriados en Múnich admite que su círculo social se compone únicamente de otros expatriados (frente al 37 % a nivel mundial). Casi dos tercios (el 65 %) consideran difícil hacer amigos locales en Múnich (frente al 41 % a nivel mundial), y solo el 37 % está satisfecho con su vida social (frente al 52 %).
Como probablemente ya habrás deducido, al visitar Múnich no esperes que los muniqueses se desvivan por ayudarte. La impresión general es la de una ciudad increíblemente ordenada, pero cuyos habitantes, reservados, no se esfuerzan mucho por entablar conversación con los turistas, ni siquiera en inglés. Incluso si te sientas a una mesa en una emblemática cervecería al aire libre, es posible que acabes compartiéndola con otros turistas... A menos, claro está, que el nivel de alcohol influya, o que tengas la suerte de estar allí durante el Oktoberfest, la famosa fiesta internacional de la cerveza, ¡cuando los bávaros se desinhiben por completo!
Lamentablemente, la situación de Múnich no es única en Alemania. El ranking de InterNations revela que otras tres ciudades alemanas se encuentran entre las menos acogidas para los expatriados: Hamburgo, Berlín y Fráncfort.
Si bien Alemania atrae por su dinamismo económico y su cultura, a veces puede resultar poco acogedora debido a la percepción de falta de calidez. Además, la barrera del idioma puede ser un obstáculo adicional: aunque en el trabajo se utiliza el inglés, el alemán puede ser fundamental para entablar amistades.
L'Internaute
