Bucaramanga pecó por inocencia y sufrió una dolorosa derrota en la Copa Sudamericana, contra Atlético Mineiro

Atlético Bucaramanga pecó por inocencia y acabó perdiendo un partido que dominó durante poco más de una hora, pero en el que no pudo levantarse de un penalto con el que Atlético Mineiro acabó ganando 0-1, en el estadio Américo Montanini.

Ahora, los dirigidos por Leonel Álvarez tendrán que resolver el próximo jueves en Belo Horizonte su futuro en la Copa Sudamericana, en la que su debut terminó siendo triste.

Bucaramanga repitió en este partido la constante de lo que fue su participación este mismo año en la Copa Libertadores: en casa le costó, pese a haber tenido distintas maneras de jugar, rivales diversos, desde los que lo exigieron con todo hasta los que se le encerraron y no lo dejaron maniobrar, como este Atlético Mineiro que tuvo como prioridad sacar el cero y luego, si podía, buscar la manera de hacer un gol.

Y así sucedió: el portero del Galo, Everson, fue clave con varias paradas de gol y con el manejo del reloj, aprovechando la generosidad del árbitro, el venezolano Alexis Herrera, que dejó hacer y dejó pasar para que el tiempo corriera. Y sobre todo, después de que Mineiro se quedó con 10, por la expulsión de Alan Franco a los siete de la segunda etapa.

Atlético Mineiro acabó ganando de pura experiencia, gracias a una jugada aislada luego de que el arquero Aldaír Quintana fuera un espectador más en buena parte del encuentro. Y el gol llegó con un penalti en el que Bucaramanga se pasó de inocente: Igor Gomes intentó girar en el área y Jefferson Mena le atravesó el brazo. Falta clara, sin necesidad de acudir al VAR.

El gol de Atlético Mineiro fue en el minuto 68 y Bucaramanga, desde ese momento, tuvo casi media hora para tratar de enderezar la historia. Antes del tanto, había hecho ocho remates a la portería. Luego del 0-1, nunca volvió a llegar.

Los locales se desesperaron y cayeron en la trampa de los brasileños, que jugaron con el código disciplinario en la mano para llegar al final del partido con el tanto de diferencia a su favor. Y para completar, el joven Bayron Duarte terminó expulsado por dejarse provocar: Herrera le sacó amarilla por un choque a Igor Gómez y al lateral colombiano, que ya tenía una...

Bucaramanga tendrá que buscar un milagro como visitante: ganar por dos goles en Belo Horizonte para llegar a octavos de final. La cuota de ayudas divinas ya se utilizó en Avellaneda, en la tan sorprendente como emocionante victoria contra Racing. Ahora deberá encender velitas para que su participación internacional no termine abruptamente.