El #PPP de Gustavo Bolívar: ¿una buena idea? / Análisis del Editor Multimedia

En momentos que estamos ad portas de una de las contiendas electorales más retadoras para nuestra democracia, surgió una propuesta que hizo Gustavo Bolívar, precandidato del Pacto Histórico, en materia de transparencia en la comunicación política digital: que los denominados ‘influenciadores’ al servicio de campañas políticas marquen con un numeral, #PPP (publicidad política pagada) sus publicaciones relacionadas con un pago de por medio.
Lejos de hablar de política en este espacio, me atrajo poderosamente la propuesta, desde la óptica de la comunicación digital: en medio del despecho, Bolívar reconoce que algunos de los ‘influenciadores’ que trabajaron con o para él en el pasado, hoy, al servicio de otros intereses y recursos, lo atacaban en redes sin especificar que lo estarían haciendo en el marco de la carrera electoral del 2026.
Más allá, Bolívar se compromete a que sus ‘influenciadores’ pondrán el mentado numeral #PPP en toda comunicación digital que hagan. Y no es una mala idea. Es profundamente evidente que la comunicación política en Colombia está tomada por completo por estrategias de manipulación de opinión disfrazadas de ‘activismo’ y libertad de opinión. Poderosas e intrincadas estructuras digitales que funcionan bajo el concepto de ‘burbujas de influenciamiento’, en donde hay herramientas, perfiles y roles dedicados al posicionamiento de mensajes, de noticias falsas o de ataques, dependiendo del pedido de la campaña, político o entidad que las contrata.
Una cuenta lanza una publicación, un numeral; luego, un ejército de cuentas bot (falsas) dinamizan el mensaje para posicionarlo; luego, cuentas reales con alcance orgánico los retoman e incluso grandes perfiles (de importantes políticos y dirigentes) terminan de impulsarlos para amplificar a la n potencia la incidencia en las audiencias.

Foto:iStock
Lo que propone Bolívar sería un primer gran paso para controlar estas estructura que en el argot popular se conocen como ‘bodegas’, por las cuales transcurren océanos de recursos, platas, tecnologías, y pauta publicitaria o contenidos pagos en Facebook, Instagram, TikTok, YouTube, etc., en forma de ‘contenido orgánico de activistas’, sin que el Consejo Nacional Electoral los regule, como sí nos toca a los medios.
Los ‘influenciadores’ y la connivencia de las redes sociales, escurridizas a la hora de responsabilizarse, poseen un alto nivel y poder de influencia en el electorado colombiano. Que seguirá creciendo. Estamos en mora de que sean regulados, controlados y sancionados ante sus evidentes fintas con fines de manipulación de la opinión pública. Que se formalice el #PPP.
eltiempo