Las lluvias torrenciales en Pakistán dejan 271 muertos

Las lluvias torrenciales en Pakistán han causado 271 muertes, incluidos 132 niños, como resultado de los monzones registrados en el país desde el 26 de junio, según la Autoridad Nacional de Gestión de Desastres de Pakistán (NDMA).
El mayor número de muertes durante las lluvias monzónicas, que suelen durar hasta septiembre en Pakistán, se produjo en la provincia oriental de Punjab, donde murieron 145 personas.
En la región montañosa de Khyber Pakhtunkhwa, al norte del país, murieron 63 personas, mientras que en la provincia de Sindh murieron 25; en Baluchistán hubo 20 muertos; en Gilgit-Baltistán (en Cachemira administrada por Islamabad) murieron ocho personas, según datos de la NDMA.
El mes pasado, ocho personas murieron en la capital de Pakistán, Islamabad.
Según el informe diario de la NDMA, actualizado al mediodía del sábado 26 de julio, 635 personas han resultado heridas en el último mes debido a las lluvias.
Las autoridades paquistaníes estiman que 271 casas quedaron completamente destruidas por las lluvias del mes pasado, mientras que 920 resultaron dañadas.
En cuanto a la actividad agrícola, las inundaciones, deslizamientos de tierra y tormentas provocaron la muerte de 367 cabezas de ganado en Pakistán entre el 26 de junio y el 26 de julio.
Según los últimos datos actualizados este fin de semana, seis niños murieron en Pakistán entre el viernes y el sábado.
El Departamento Meteorológico de Pakistán predice que otro fuerte período de lluvias monzónicas afectará varias regiones paquistaníes a partir del lunes.
Se espera que esta lluvia, la quinta del monzón, afecte a las provincias de Punjab, Khyber Pakhtunkhwa, Sindh y Baluchistán.
Además, la Autoridad Provincial de Gestión de Desastres de Punjab (PDMA) ha emitido una alerta de inundación para las zonas bajas de Islamabad y Punjab, por donde fluyen algunos de los ríos más importantes de Pakistán.
Pakistán es uno de los países más vulnerables del mundo a los efectos del cambio climático y con frecuencia experimenta fenómenos extremos.
En 2022, lluvias monzónicas sin precedentes y el derretimiento de los glaciares sumergieron un tercio del país, causando 1.700 muertos y graves daños a la economía de este país asiático.
observador