Días felices

Un día soleado y sin viento, en el que puedo fumar junto a la ventana sin esparcir ceniza, un día en el que cocino para alguien a quien amo y observo a esa persona comer con placer, un día en el que olvido que tengo cabeza, en el que ordeno cajones, limpio armarios, lavo los platos, aspiro la casa, encero el suelo y plancho, un día en el que soy capaz de leer sin perder el interés tras las primeras líneas, un día en el que leo algo extraordinario por primera vez y te leo ese pasaje en voz alta, un día largo, en el que hay tiempo para todo y poco que hacer, mientras el tren pasa a lo lejos y los barcos navegan por el río, un día en la playa, un día en una carretera en la que nunca hemos estado, en el que soy tan olvidadiza de mí misma que no temo al monstruo de la vuelta de la esquina, un día entero riendo y bromeando sobre cosas serias, un día pasado en la calle como si estuviera en casa, porque estoy contigo y tú eres mi hogar, un día sin malos recuerdos, sin la llamada de la tristeza, un día en el que no hay noticias, uno de esos días en los que no pasa nada especial y no lees los periódicos, un día en el que escribes y te gusta lo que has escrito, o el día después de haber escrito mucho, en el que dejas reposar lo que has escrito hasta que te olvidas por completo de lo que has escrito, un día de periódicos, cigarrillos y café, o el primer día de algún propósito importante, como leer menos periódicos, no fumar tanto y no tomar tanto café, el día en que completas un trabajo importante, un día de merecido descanso, el primer día de un nuevo proyecto, el día en el que descubres el título del libro, el día en el que tocas algo que hiciste y es más bonito de lo que pensabas y ha pasado el tiempo y lo habías olvidado, el día en el que haces un amigo, el día en el que sientes más compasión por quién eras y por los demás, el día en el que puedes centrarte en las cosas buenas de la vida y olvidarte de las tristes, un día pasado escuchando música, o pasado en silencio, un día en el que alguien te sorprende o te sorprende, el día en el que recibes dinero por tu trabajo, un día en el que no pienso en el dinero ni una sola vez, un día en una terraza tomando el sol, un día sin tiempo, sin oposiciones interiores, un día con amigos nuevos y viejos, el día en que vuelvo a ver a alguien a quien quiero y extraño, un día en que vuelvo a casa después de un largo viaje, el día en que alguien me ofrece flores, el día en que me fijo en algo bello, las ramas de un árbol, una nube sobre el río, la sombra que hacen nuestras manos al caminar, alguien me toma la mano si necesito ayuda, el día en que canto el cumpleaños feliz a un octogenario, un día sin miedo y sin soledad, un día en que voy a votar y me lleno de una buena sensación de deber cumplido, de ser parte de algo más grande que yo, que es bello y está vivo y por lo que vale la pena estar vivo.
observador