El clima económico inestable dicta la política del próximo gobernador

Seleccione idioma

Spanish

Down Icon

Seleccione país

Portugal

Down Icon

El clima económico inestable dicta la política del próximo gobernador

El clima económico inestable dicta la política del próximo gobernador

El próximo gobernador del Banco de Portugal (BdP) no lo tendrá fácil. La presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, ya ha admitido que «vivimos en un mundo mucho más incierto» y que la política monetaria podría verse obligada a cambiar de estrategia, como reconocieron expertos a Nascer do SOL, considerando que «los desafíos son numerosos en un panorama internacional marcado por una alta incertidumbre, dictada por las tensiones geopolíticas globales».

En declaraciones a nuestro periódico, el economista senior de Banco Carregosa, Paulo Rosa, afirmó que «a medida que se profundiza la desaceleración económica mundial, la economía portuguesa se enfrentará a dificultades cada vez mayores para mantener el ritmo de crecimiento registrado en los últimos años, impulsado por niveles récord de empleo, el dinamismo del turismo y una importante inversión extranjera». Recordó que, si bien el BCE ha reducido los tipos de interés en 200 puntos básicos en los últimos doce meses, del 4 % al 2 %, estos se mantienen relativamente altos en comparación con el período de tipos de interés negativos de la última década. Y, aunque el nivel de deuda pública ha disminuido drásticamente en los últimos años, la deuda privada mantiene una trayectoria ascendente. En este contexto, el Banco de Portugal debe fortalecer aún más la resiliencia del sector bancario ante shocks externos, ya sean de naturaleza geopolítica, energética o tecnológica. Al mismo tiempo, será crucial adaptar la supervisión bancaria a la transformación digital y a la creciente importancia de las fintechs y los criptoactivos en la vida cotidiana, garantizando que la innovación financiera no comprometa la seguridad y la estabilidad del sistema. Asimismo, será esencial fortalecer la credibilidad e independencia del Banco de Portugal, garantizando una comunicación eficaz y defendiendo los intereses nacionales en el contexto de la unión bancaria y monetaria europea, subraya.

Inflación y tipos de interés: qué esperar. Según Paulo Monteiro Rosa, los bancos centrales tenderán a asumir un papel aún más central en la gestión de riesgos sistémicos, dado un clima económico inestable marcado por dos guerras, y en la preservación de la estabilidad financiera. «Si bien su misión principal, la estabilidad de precios, se mantiene, podrían verse obligados a cambiar de rumbo en ciertas áreas, adoptando políticas más flexibles que concilien la lucha contra la inflación con el apoyo al crecimiento económico y el fortalecimiento de la resiliencia del sistema financiero», declara a nuestro periódico, admitiendo que los organismos reguladores deberán fortalecer la coordinación con los gobiernos para afrontar las perturbaciones externas —energéticas, tecnológicas y militares— y garantizar que la política monetaria no entre en conflicto con las necesidades de seguridad económica y social.

Y a pesar de reconocer que la inflación se ha desacelerado considerablemente y se acerca al objetivo del BCE del 2%, gracias en parte a la caída del precio del barril de petróleo, señala que esta combinación de factores es deflacionaria y podría permitir al BCE implementar recortes adicionales de los tipos de interés, además del único recorte que el mercado prevé actualmente para finales de año. «La apreciación del euro frente al dólar, actualmente en su nivel más alto desde septiembre de 2021, también refuerza el margen de maniobra del BCE para reducir los tipos de interés si continúa esta tendencia de desaceleración económica», añade. El analista de XTB, Henrique Tomé, también admite que, actualmente, se espera que la inflación se mantenga más persistente de lo previsto inicialmente y, por lo tanto, los mercados monetarios anticipan que los recortes de los tipos de interés del BCE serán más moderados y se implementarán de forma más gradual. Es probable que la inflación se mantenga por encima de los objetivos hasta finales de 2026. En este contexto, es probable que el BCE solo realice un recorte más de los tipos de interés. Aun así, tanto el ritmo como la magnitud de estos recortes se han ido ralentizando gradualmente, señala.

Rol menos relevante Según el analista de XTB, el rol del gobernador del Banco de Portugal ha ido perdiendo relevancia en los últimos años, «en parte debido a los fallos y a la falta de transparencia hacia la población», mencionando también que, «además, sus poderes en política monetaria son bastante limitados, ya que las principales decisiones las toma el Banco Central Europeo». Sin embargo, deja una advertencia: «Con la economía mostrando signos de aceleración, la inflación cayendo y los tipos de interés bajando, los retos que esperan al próximo gobernador parecen, a primera vista, menos exigentes que los que afrontaron sus predecesores», de ahí el argumento de que el próximo gobernador debería ser «una persona totalmente transparente y capaz de comunicar información relevante a la población de forma sencilla y accesible», añadiendo que «es esencial que pueda explicar con claridad las previsiones sobre los tipos de interés, la inflación, la evolución salarial y los cambios en el poder adquisitivo, factores cruciales para que los ciudadanos puedan tomar decisiones económicas informadas y racionales».

Al mismo tiempo, Henrique Tomé argumenta que este perfil debe ser independiente de cualquier vínculo político-partidista, “garantizando un desempeño verdaderamente independiente de la política nacional”, considerando que es “igualmente importante que cuente con una sólida experiencia en macroeconomía y el sector bancario, así como una postura prudente y rigurosa con respecto a la supervisión de las instituciones financieras”. Una opinión compartida por Paulo Monteiro Rosa al argumentar que el perfil deseado para el próximo gobernador del Banco de Portugal debe basarse, sobre todo, en la independencia y una reputación de equidistancia del poder político. “Es esencial que se trate de una persona con reconocida credibilidad técnica, experiencia relevante en el sector financiero y la capacidad de afirmar la autonomía institucional del Banco, garantizando la confianza de los mercados y la sociedad”, concluye.

Jornal Sol

Jornal Sol

Noticias similares

Todas las noticias
Animated ArrowAnimated ArrowAnimated Arrow