Un experimento espacial de la Universidad de Szczecin podría ayudar en un vuelo a Marte.

Prof. Ewa Szuszkiewicz: «No detendremos el impulso de la exploración espacial». Foto: Alan Sasinowski
En los próximos 50 años, el primer ser humano volará a Marte, estima la profesora Ewa Szuszkiewicz, de la Universidad de Szczecin. El éxito de esta misión podría deberse a la investigación encargada por nuestra universidad y realizada en la Estación Espacial Internacional por Sławosz Uznański-Wiśniewski.
El segundo polaco en el espacio después de Mirosław Hermaszewski, quien ha sido el centro de atención durante las últimas semanas, ha llevado a cabo más de una docena de experimentos diseñados para impulsar la ciencia en nuestro país. Entre ellos se encuentra el proyecto "Antes de ir a Marte: ¿Pueden los tardígrados ayudar a proteger a otros organismos en el espacio?", liderado por un consorcio de tres universidades: la Universidad de Szczecin, líder; la Universidad Adam Mickiewicz de Poznań; y la Universidad de Silesia de Katowice. El experimento consistió en probar levaduras modificadas con genes de tardígrados, organismos extremadamente resilientes. Esto permitirá evaluar el posible uso de dichas levaduras como biofactorías, por ejemplo, para producir alimentos o combustible para misiones a la Luna y Marte.
"Los resultados de los análisis nos brindarán información sobre cómo el gen tardígrado mejoró el funcionamiento de la levadura en condiciones de microgravedad", declaró la profesora Ewa Szuszkiewicz, del Instituto de Física de la Universidad de Silesia y coordinadora del proyecto, durante una conferencia de prensa celebrada el jueves en el Senado de la Universidad de Silesia. "El siguiente paso será incorporar la radiación ionizante".
Y esto es crucial, porque la radiación ionizante es el mayor obstáculo para un viaje a Marte. Es mortal para el cuerpo humano. Sobre todo porque el vuelo duraría mucho tiempo —actualmente, hablamos de entre seis y nueve meses, dependiendo de la configuración planetaria— y los astronautas absorberían una dosis masiva de radiación. La levadura genéticamente modificada podría acercarnos a comprender cómo defendernos de la radiación.
«En la era de las agencias espaciales privadas, hay un gran impulso (para un vuelo a Marte - AS)», declaró la profesora Ewa Szuszkiewicz. «Al igual que la carrera a la Luna, que ahora es como una carrera de 100 metros, todos quieren ser los primeros. La idea de quién será el primero no es clara ni evidente. Sin embargo, no detendremos la carrera por explorar el espacio. La humanidad está en camino. Polonia debe sumarse a esta carrera. No podemos quedarnos atrás, no podemos quedarnos atrás».
Más sobre este tema en "Kurier Szczeciński" y eKurier del 18 de julio de 2025.
Alan Sasinowski
Kurier Szczecinski