Demanda colectiva por vivienda en las Primeras Naciones llega a los tribunales esta semana

Esta semana se está escuchando en el Tribunal Federal de Winnipeg una demanda colectiva contra Canadá por no proporcionar viviendas adecuadas en tierras de las Primeras Naciones.

La Primera Nación St. Theresa Point en Manitoba y la Primera Nación Sandy Lake en el noroeste de Ontario presentaron la demanda en 2023. Más de 100 Primeras Naciones se han sumado a la demanda colectiva.

En la declaración de demanda se alega que Canadá ha "financiado deliberadamente de forma insuficiente las viviendas en las reservas", al tiempo que ha aislado a las Primeras Naciones al imponer restricciones a su capacidad de proporcionarse vivienda por sí mismas.

El equipo legal de las Primeras Naciones dice que este es el primer caso que considera la obligación del gobierno federal de proporcionar vivienda adecuada a las Primeras Naciones.

"La crisis de vivienda en la reserva es una vergüenza nacional", dijo el jefe de St. Theresa Point, Raymond Flett, en un comunicado de prensa.

"Nuestros hijos y las generaciones futuras merecen crecer en una vivienda digna donde puedan sobrevivir y prosperar".

La demanda colectiva solicita 5 mil millones de dólares en daños y perjuicios.

La demanda de 2023 alega que el 25% de las 646 casas de St. Theresa Point, a 465 kilómetros al noreste de Winnipeg, deberían ser declaradas inhabitables debido a un deterioro y putrefacción graves, y que más de la mitad de las casas de Sandy Lake, a 450 kilómetros al noreste de Winnipeg, necesitan reparaciones importantes.

La declaración de demanda se refiere a una estrategia del gobierno federal de 1977 que proporcionaría a las viviendas "infraestructura física que cumpla con los estándares de salud y seguridad comúnmente aceptados" similares a los de las comunidades no indígenas vecinas.

La demanda también alega que la intensidad del brote de gripe H1N1 de 2009 en St. Theresa Point se debió a la falta de agua corriente y al hacinamiento en las viviendas. Señala que la respuesta de Canadá al brote de gripe fue enviar bolsas para cadáveres en lugar de responder al origen de la crisis.

El comunicado de prensa indicó que todavía es común que 20 personas compartan una casa pequeña y vivan en viviendas estructuralmente "cayendo a pedazos" o sin plomería.

Canadá afirma que no hay obligaciones legales en materia de vivienda

La declaración de defensa de Canadá decía: "Canadá no construye ni mantiene viviendas en reservas.

Las Primeras Naciones son responsables de planificar, adquirir y gestionar su parque de viviendas. Canadá apoya sus proyectos de vivienda mediante financiación...

Canadá no tiene ninguna obligación ni obligación legal de construir y mantener viviendas en la reserva. La demanda debe ser desestimada.

En su declaración de defensa de 2024, Canadá afirmó que 185 de las casas en St. Theresa Point requieren reparaciones importantes y 25 casas requieren reemplazo y que, de 432 casas en Sandy Lake, alrededor de 55 de ellas requieren reparaciones importantes y 55 requieren reemplazo.

La declaración de defensa también señaló que la falta de agua corriente y el hacinamiento en las viviendas fueron identificados por la Agencia de Salud Pública de Canadá como posibles factores que contribuyeron al brote de H1N1 de 2009 en St. Theresa Point.

Negó el resto de la acusación, diciendo que Canadá respondió de manera significativa al brote y que se aconsejó a las estaciones de enfermería de Salud Canadá que solicitaran productos farmacéuticos, suministros médicos y equipos complementarios para proporcionar cuatro meses de existencias en lugar de las seis semanas normales de existencias.

Se espera que la audiencia concluya el jueves.