Electrolitos y deporte: cómo hidratarse correctamente para mantenerse eficiente

La hidratación es un tema clave para todos los deportistas y algunas personas se preguntan: "¿Para qué se utilizan los electrolitos en el deporte y cómo mantenerse hidratado?"
Los electrolitos son minerales esenciales para el buen funcionamiento del organismo y su papel no debe subestimarse. Los principales electrolitos son el sodio, el potasio, el calcio y el magnesio. Facilitan la contracción muscular, garantizan el correcto funcionamiento del corazón y ayudan a retener agua en el cuerpo. Al sudar mucho, perdemos no solo agua, sino también estos minerales esenciales. Si estas pérdidas no se compensan, pueden provocar fatiga, calambres e incluso alteraciones del ritmo cardíaco.
La importancia de los electrolitos depende en gran medida del tipo y la duración del ejercicio. Para una actividad moderada de menos de una hora, el agua es más que suficiente para mantenerse hidratado. Sin embargo, para entrenamientos más largos o intensos, como correr, andar en bicicleta o triatlones, especialmente en climas cálidos, se recomienda optar por una bebida con electrolitos y un poco de azúcar. Según el Colegio Americano de Medicina del Deporte, estas bebidas deben contener menos del 6 % de azúcar y menos de 50 mg de sodio por 100 ml para ser eficaces y seguras.

Sin embargo, tenga cuidado de no confundir estas bebidas isotónicas con las bebidas energéticas. Productos como Red Bull contienen principalmente cafeína y azúcar, que pueden estimular temporalmente, pero deshidratan en lugar de hidratar. Por lo tanto, para los deportistas, es mejor optar por bebidas isotónicas, que compensan las pérdidas de electrolitos y facilitan la recuperación tras el ejercicio.
En resumen, mantenerse hidratado durante el ejercicio no se trata solo de beber agua. Comprender la función de los electrolitos y adaptar las bebidas a la duración e intensidad del entrenamiento es clave para mantener el rendimiento y proteger el cuerpo.
RMC