Olivier Faure reelegido como jefe del Partido Socialista

El Partido Socialista (PS) anunció la mañana del viernes 6 de junio que su actual primer secretario, Olivier Faure, fue reelegido en el cargo . Faure obtuvo el 50,9% de los votos, frente al 49,1% de su principal oponente, el alcalde de Ruán, Nicolas Mayer-Rossignol.

"Mis felicitaciones a Olivier Faure y a sus seguidores", reaccionó Nicolas Mayer-Rossignol a los resultados en su cuenta X. El alcalde de Normandía también aprovechó la oportunidad para agradecer a los aproximadamente 12.000 activistas — "casi la mitad" de los votantes, insistió— que lo habían elegido. "Gracias a los activistas que han renovado su confianza en mí ", se regocijó Olivier Faure . "A partir de mañana, continuaremos el trabajo que iniciamos en 2018 para generar impulso, con un partido socialista arraigado en el corazón de la izquierda".

Un resultado "reconocido por todos", asegura un comunicado de prensa del Partido Socialista, que anuncia la ausencia de impugnación de la votación por parte de los opositores del diputado de Seine-et-Marne. Además, aunque aún se esperan los resultados de algunas federaciones, estas ya no podrán revertir el resultado de la votación , anunció el partido. Dos años después del congreso de Marsella, que vio a los mismos dos candidatos luchar por la victoria durante varios días, en un contexto de acusaciones de fraude, la noche del jueves al viernes —los aproximadamente 40.000 miembros del partido tenían hasta las 22:00 para elegir a la dirección del partido— dio lugar a una nueva disputa numérica, aunque más moderada.

El equipo de Olivier Faure se atribuyó rápidamente la victoria, mientras que el de su rival habló de un margen de votos demasiado estrecho como para que alguien pudiera afirmar estar en cabeza. «Estamos empatados, nadie puede decir quién ganó», replicó la alcaldesa de Vaulx-en-Velin, Hélène Geoffroy, poco después de la medianoche, refiriéndose a un margen de «menos de 150 votos». El mismo tono fue repetido por el exsenador David Assouline, quien entonces estimó que «lo que comunicaron los líderes no se corresponde con la realidad».

«El resultado final será muy ajustado en cualquier caso», añadieron los partidarios del alcalde de Ruan (desde la presidenta de Occitania, Carole Delga, hasta el alcalde de Saint-Ouen, Karim Bouamrane), considerándolo una «repudia» del liderazgo saliente. Olivier Faure se alzó con la victoria en la primera vuelta, el 27 de mayo, con el 42,21% de los votos, mientras que Nicolas Mayer-Rossignol alcanzó el 40,38%.

Boris Vallaud, líder del grupo parlamentario socialista y tercera figura del partido en entrar en la contienda, solo obtuvo el 17,41% de los votos, lo que le impidió pasar a la segunda vuelta. Vallaud indicó entonces que votaría por el Primer Secretario saliente a título personal, sin dar instrucciones de voto a sus tropas y advirtiendo que su elección no era un "cheque en blanco" para Olivier Faure, a quien culpa de la falta de trabajo interno y la división dentro del partido.

La victoria de Olivier Faure también refleja su estrategia política para las próximas elecciones presidenciales, principal punto de discordia con el bando Mayer-Rossignol, que sigue abiertamente los pasos del expresidente François Hollande. El reelegido Primer Secretario del Partido Socialista (PS) aboga por una unión de la izquierda —sin La Francia Insumisa (LFI) —, desde Raphaël Glucksmann hasta François Ruffin. Nicolas Mayer-Rossignol —quien ha deplorado repetidamente al PS, al que considera víctima de un debilitamiento y contracción— aboga por la construcción de un gran partido que una a los socialistas y a quienes los rodean, como Raphaël Glucksmann y el exprimer ministro (2016-2017) Bernard Cazeneuve.

El alcalde de Ruán se ha presentado principalmente como portavoz de los socialistas que denuncian una conexión demasiado estrecha con La Francia Insumisa. Y esto, a pesar de que ambos partidos políticos se han distanciado abiertamente, tanto tras la creación de Nupes en 2022 como del Nuevo Frente Popular (NFP) en 2024. «No me arrepiento de lo que hicimos», respondió Olivier Faure, enfatizando que cuando el NFP ganó las elecciones legislativas anticipadas de 2024, «Nicolas Mayer-Rossignol no lo consideró un disparate».