'Sleep coach', el nuevo perfil que acaba con el desvelo familiar del insomnio infantil

Muchos estudios corroboran que el adecuado descanso de los pequeños es un pilar esencial para un desarrollo saludable. La falta de sueño se asocia con dificultades en la atención, irritabilidad, problemas de memoria y mayor riesgo de desarrollar trastornos conductuales en la infancia. Además, el descanso insuficiente puede afectar al crecimiento, ya que en el sueño profundo se libera la hormona del crecimiento. Por otra parte, este problema también impacta en la salud y bienestar de los padres: fatiga crónica, irritabilidad, ansiedad e, incluso, depresión posparto en las madres son algunas de sus consecuencias directas que, a la larga, también se dejan notar en la calidad de vida familiar.
En este proceso hacia una mayor concienciación, nuestro país se ha fijado en una figura popular en la cultura anglosajona: los consultores de sueño infantil. Los 'sleep coach' disfrutan de gran popularidad, especialmente en EE.UU., donde algunas celebridades han explicado en redes cómo han pasado del agotamiento de noches en blanco a la solución definitiva gracias a estos profesionales que observan, analizan, dan pautas y acompañan a los padres en este reto.
Esta figura llamó la atención de Emma Salado, matrona de profesión desde 2010, que ha trabajado en centros de salud y centros privados en España, impartiendo clases de preparación al parto a la vez que intercalaba contratos en un hospital. Tras trabajar durante años en atención directa en los partos y en visitas domiciliarias en las dos primeras semanas de vida (cuidados, lactancia, etc…) tuvo que hacer un parón profesional.
«En 2019 nacieron mis mellizos de manera prematura. Quizá ha sido la experiencia más dura y a la vez más maravillosa de mi vida -explica-. Tras 14 meses sin apenas descansar, empecé a interesarme por el sueño de los bebés, ya que había acompañado a familias en situaciones parecidas y ahora era yo la que me encontraba perdida y muy cansada. Sin embargo, tenía claro que quería que fuera un proceso respetuoso con toda la familia, al fin y al cabo, nuestra situación cuando nacieron mis mellizos, ya fue lo suficientemente dura para todos».
Tras mucho investigar, ya que en España esta opción aún no estaba muy extendida, Emma Salado decidió contratar los servicios de una asesora de Gentle Sleep Coach, una de las certificaciones internacionales pioneras en este ámbito. «La experiencia no pudo ser más positiva. En unos días ya conseguíamos descansar bastante y unas semanas después dormíamos prácticamente toda la noche. Tras un tiempo viendo los estupendos resultados, decidí certificarme y ser yo la que pudiera ayudar a otras familias». Y así, en 2021 surgió Emmatrona que, junto a un equipo de profesionales certificadas en lactancia y sueño infantil, establecen rutinas saludables, ayudan a las familias a comprender las señales de sueño del niño y fomentan hábitos que favorezcan un descanso reparador sin recurrir a soluciones invasivas. En su plataforma, Emmatrona ofrece diversos servicios, incluyendo planes de sueño personalizados y consultas individuales, tanto presenciales como online.
«La sanidad tradicional ha dado pasos importantes, pero el sueño infantil es un área compleja que requiere de una formación específica y actualización constante que a día de hoy todavía no está presente en ningún programa académico de las titulaciones sanitarias», explica Laura Pazos, directora de Sleepy Kids, empresa líder en este sector en España que cuenta con una comunidad de más de 10.000 familias acompañadas, y que no sólo se dedica al acompañamiento de las familias, sino que ofrece formación a profesionales sanitarios (más de 80 en el último año).
«En este sentido tenemos un problema grave, ya que es una especialidad que todavía no está regulada en nuestro país -explica Pazos-. Tradicionalmente las principales escuelas tenían su sede en EE.UU. y su objetivo era formar 'coach de sueño' mediante un curso de unos tres meses, sin exigir ninguna formación ni experiencia previa en el ámbito sanitario o infantojuvenil. Estas escuelas enseñaban a 'entrenar' a los bebés con un método concreto -el método de la silla o el 'shuffle'- que no deja de ser un método de extinción gradual de llanto controlado. En los últimos años, alumnos de esas mismas escuelas han reproducido ese mismo modelo aquí en España creando escuelas de 'coach' o de asesores de sueño propias».
La directora de Sleepy Kids explica que, en consecuencia, muchas de las formaciones que encontramos a día de hoy en el mercado en España tampoco piden requisitos de acceso, como sería el caso de contar con una titulación sanitaria previa, que debería ser básica. «Suelen estar orientadas a madres que buscan un cambio de rumbo profesional, una conciliación laboral más flexible o una mejora económica. Y también siguen perpetuando 'métodos de entrenamiento' basados en el llanto, ya sea controlado o no, y poco individualizados a las necesidades del bebé o de su familia, cuando a día de hoy, ya tenemos estudios que evidencian que el llanto no atendido de forma eficaz puede causar alteraciones en el desarrollo del cerebro», expone.
En su opinión, nunca debería justificarse una intervención que promueva el llanto del bebé bajo ninguna circunstancia, ya que en el largo plazo podría tener consecuencias indeseables. «Un especialista en sueño infantil -continúa- ha de ser, por tanto, un profesional titulado que tenga una formación académica previa y una profesión afín al ámbito de la maternidad, el desarrollo infantil y la crianza, como los psicólogos infantiles o los pediatras, que recibe en este caso una formación específica relativa al sueño infantil que le habilita a diagnosticar, tratar y asesorar sobre problemas relacionados con el sueño en niños tanto a nivel estructural como emocional y conductual. No existe un método, sino un enfoque global hacia la mejora de la situación teniendo en cuenta las necesidades de la familia y del bebé».
Pazos apunta que en esta materia España vive un momento de cambio: «Desde diferentes organismos estamos trabajando para ofrecer certificaciones regladas específicas para profesionales sanitarios en el área de sueño infantil. El intrusismo representa un riesgo importante: al carecer de titulación oficial, las familias no tienen las herramientas para distinguir a los profesionales cualificados de los que no lo son y son asesoradas por personas sin formación sanitaria ni aval científico, lo que puede comprometer no solo el descanso, sino también el bienestar emocional de los bebés. Pero esto está cambiando. Nuestro compromiso es claro: trabajar siempre desde el rigor científico, el apego seguro y el respeto profundo a cada familia».
ABC.es