El bonito pueblecito europeo donde a los lugareños se les ordenó "evitar la muerte"

Europa está repleta de famosos balnearios que prometen tratamientos para curar diversas dolencias, además de ofrecer recuperación a personas cansadas y con exceso de trabajo. Algunos de los balnearios más conocidos e históricos incluyen Karlovy Vary en la República Checa, patrimonio de la UNESCO famoso por sus aguas termales y su pintoresca arquitectura, y Budapest en Hungría.
La ciudad húngara es conocida a menudo como la «Capital Europea de los Balnearios» por sus numerosos baños termales. Sin embargo, ambos balnearios pueden estar abarrotados debido a su enorme popularidad. Quienes busquen un entorno más tranquilo deberían considerar visitar Lanjarón, en España .
Ubicado en la Sierra Nevada de Granada, el pueblo es una puerta de entrada a la región de la Alpujarra. También es famoso por sus aguas minerales y su balneario, el Balneario de Lanjarón.
El pueblo se hizo famoso tras la promulgación de un inusual decreto en 1999 que prohibía a los residentes morir. Esta inusual prohibición fue impuesta por el entonces alcalde José Rubio después de que el cementerio local alcanzara su capacidad máxima y se retrasaran los planes de ampliación.
Como no quedaba espacio para los entierros, la medida de Rubio fue concebida como una protesta irónica para llamar la atención sobre el problema.
Su decreto instaba a los vecinos a "tomar las medidas necesarias para evitar la muerte" y el pueblo acaparó rápidamente los titulares. En aquel entonces, se consideraba que tenía una de las poblaciones más antiguas de España .
A pesar del carácter satírico del decreto, las familias quedaron devastadas y exploraron opciones de entierro en pueblos vecinos.
El residente local Marcos Simón reconoció que la orden fue un "truco publicitario", aunque molestó a algunos, y dijo al sitio web Euroweekly : "Muchos de los aldeanos estaban extremadamente molestos y frustrados porque creían que tenían que encontrar otras áreas donde enterrar a sus fallecidos".
La escasez de cementerios ya se ha resuelto, pero el decreto de “no muerte” sigue siendo una anécdota definitoria en la historia del pueblo.
Daily Express