El ministro de prisiones afirma que podrían construirse en el Reino Unido cárceles de máxima seguridad al estilo estadounidense en medio de la violencia contra el personal.

Gran Bretaña podría ver la introducción de prisiones "supermax" al estilo estadounidense como respuesta a una ola de episodios violentos entre los reclusos, anunció el ministro de Prisiones.

El ministro James Timpson declaró que "no deberíamos descartar nada" al explorar la posibilidad de construir instalaciones de alta seguridad similares a las que hay en Estados Unidos para encarcelar a los criminales más peligrosos.

Según Sky , esta intervención sigue los pasos de un episodio desgarrador ocurrido recientemente en la prisión HMP Belmarsh, donde el triple asesino de niños Axel Rudakubana está acusado de rociar a un funcionario de la prisión con agua hirviendo de una tetera, un incidente que ahora está siendo investigado por la policía.

En otro suceso alarmante, se dice que Hashem Abedi, hermano de Salman Abedi, autor del atentado del Manchester Arena, agredió a tres oficiales con aceite de cocina caliente y "cuchillos improvisados", que se cree estaban hechos con una bandeja de horno.

En una charla en Politics Hub con Sophy Ridge directamente desde HMP Preston, el Sr. Timpson admitió que las cárceles británicas están en crisis y exigió acciones inmediatas y contundentes, informa el Express .

Al criticar las condiciones que heredó dentro del sistema penitenciario, comentó:

Heredamos un completo desastre en el sistema penitenciario. La violencia y las agresiones al personal han aumentado. Pero, en mi opinión, no deberíamos descartar nada.

Timpson, quien asumió el cargo de ministro de prisiones el año pasado tras su etapa como director ejecutivo del Grupo Timpson, subrayó la importancia de colaborar con los trabajadores penitenciarios. "Lo que necesitamos hacer es hablar con nuestro personal. Son los expertos en tratar con estos delincuentes día tras día".

El Sr. Timpson ha reconocido que la violencia en las cárceles es desenfrenada, vinculándola principalmente al hacinamiento y a la falta de actividad con un propósito.

"Cuando las cárceles están tan llenas, y quienes están allí no reciben educación ni realizan actividades con un propósito, se genera más violencia, lo cual es totalmente inaceptable", comentó.

Nuestro personal acude al trabajo para ayudar a las personas a cambiar su vida. Quieren cambiarles la vida. No acudieron al trabajo para ser agredidos. Es totalmente inaceptable.

En medio de los planes para una revisión exhaustiva de las reglas de sentencia, el Sr. Timpson llamó la atención sobre desafíos persistentes como la dependencia de las drogas, la falta de vivienda y las crisis de salud mental entre los liberados de prisión.

Señaló: «El 80% de los delitos son reincidentes. La gente abandona lugares como la prisión de Preston con adicción a las drogas, sin dónde vivir y con problemas de salud mental, y por eso siguen regresando».

Cuando se le preguntó sobre la prevalencia de los problemas de drogas en todas las cárceles del Reino Unido, el ministro fue categórico: "100%".

Concluyó: «Si queremos mantener la seguridad pública, necesitamos trabajar mucho más aquí y en la comunidad. Pero también necesitamos construir más cárceles».