Seis estados no cumplen con el número mínimo de horas requeridas para la escuela secundaria, según un estudio

Seis estados no cumplen con el requisito mínimo de 2.400 horas de educación general básica en la educación secundaria , según un estudio realizado por la Red de Escuelas Públicas y Universidades, Repu, divulgado este jueves 31.
La norma, establecida por una ley sancionada en 2024 por el presidente Lula (PT), rompe con el modelo de reforma establecido bajo el gobierno de Michel Temer (MDB), que había reducido el tiempo dedicado a las disciplinas a 1.800 horas (con 1.200 horas para la parte diversificada de los itinerarios de formación).
Actualmente, la educación secundaria debe cubrir un total de 3.000 horas, de las que 2.400 se dedican a formación básica y 600 a itinerarios formativos.
Investigadores de Repu evaluaron los marcos curriculares estatales en tres fases: antes de la implementación de la Nueva Escuela Secundaria, durante la implementación de la reforma de Temer y en el marco vigente este año. Posteriormente, compararon las horas de clase oficialmente implementadas (en minutos) en los 27 sistemas escolares estatales. El análisis se basó en programas de secundaria de tiempo parcial y diurno.
Análisis por estadosLa conclusión es que Amazonas, Bahía, Rondônia, Santa Catarina, Pará y Minas Gerais incumplen requisitos de la reforma de 2024 En total, 19 estados ya han implementado el cambio del año pasado.
Según los investigadores, los casos más graves están en Amazonas y Bahía, que aún no avanzaron en la ampliación del número de horas lectivas de enseñanza media a las 3.000 horas lectivas totales exigidas por ley hasta 2022.
El estudio indica que en Bahía funcionan clases de 50 minutos, sin que esto conste en documentos oficiales.
"La jornada de 5 horas lectivas (4 horas y 10 minutos en el aula + 30 minutos de recreo) que se practica en las escuelas públicas de Bahía implica una carga horaria de educación general básica un 16,7 % inferior a los límites establecidos en la Ley n.º 14.945/2024", afirma el estudio. El tiempo dedicado a la educación básica en el estado ni siquiera alcanza las 1.800 horas establecidas en la reforma anterior, según el monitoreo.
En Amazonas , los investigadores encontraron una fluctuación en el tiempo de clase de 45 a 48 minutos, resultando en una oferta de formación general básica un 20% inferior a las 2.400 horas.
En estos dos estados, añaden los investigadores, la pérdida de tiempo de clase equivale al menos a 100 días lectivos.
En Rondônia y Santa Catarina , no todas las escuelas cumplen con el módulo de clase oficial de 48 minutos, que en la práctica ofrece clases de 45 minutos. Esto se traduce en pérdidas que alcanzan el 6,3 % de la carga horaria de la educación general básica para 2025, lo que equivale a 1,5 clases menos por semana durante los tres años de secundaria.
El estudio también observó en Rondônia la amplia oferta de educación a distancia en las disciplinas básicas de la enseñanza media diurna, no atendiendo al régimen de excepcionalidad de la modalidad.
Pará , a su vez, autoriza a las escuelas estatales a realizar un módulo de clase de 45 minutos (menos que el módulo oficial de 50 minutos), bajo la justificación de dificultades operativas con el transporte escolar compartido con los municipios, lo que también provoca una pérdida del 6,3% de la educación general básica.
Minas Gerais , aunque haya regulado el uso de “actividades extracurriculares” en unidades de tiempo parcial, no ha creado condiciones para que las escuelas operacionalicen esa regulación, lo que ha llevado a la autorización para que una masa de estudiantes deje de asistir a la sexta clase de la jornada, reservada para itinerarios formativos.
El entendimiento es que, en términos comparativos, la reforma de 2024 no recuperó totalmente la carga de trabajo de las materias básicas eliminadas por la reforma de 2017. Para 2025, el estudio calculó una pérdida neta de 13,7% en la educación general básica en comparación con el período anterior a las dos reformas.
«Estas desigualdades reflejan las decisiones políticas de los administradores, que carecen de apoyo pedagógico», afirma el investigador Fernando Cássio , uno de los autores del estudio. «Estados como São Paulo y Paraná han exacerbado esta lógica al implementar reformas desiguales, aumentando el número de horas dedicadas a portugués y matemáticas, pero sin compensar las horas dedicadas a asignaturas como sociología y filosofía».
Según el educador, la táctica de capacitar a los estudiantes para que presenten evaluaciones externas, como la SAEB , se utiliza con frecuencia, lo que puede servir como moneda de cambio político, especialmente en períodos electorales. Aboga por la vigilancia nacional y la adopción de medidas para evitar que los estados abusen de su autonomía.
Recomendaciones a los Estados y a los organismos de controlComo resultado del análisis, los investigadores recomiendan que las redes estatales publiquen el currículo de secundaria, informen explícitamente la duración de las clases y respeten la carga horaria mínima para la etapa escolar, comprometiéndose a ampliar la jornada escolar a 5 horas diarias (6 clases/día).
También exigen que el Consejo Nacional de Educación, los Ministerios Públicos y demás organismos de control y fiscalización monitoreen las redes educativas y evalúen los efectos del incumplimiento de las horas que deben dedicarse a la educación básica.
Otra sugerencia es revisar la disposición de la Ley 14.945/2024 que abre la posibilidad de aprovechamiento de “actividades extracurriculares” en la Enseñanza Media, “ya que su implementación efectiva, incluso limitada a las escuelas de tiempo completo, es inviable en las redes estatales y puede violar el derecho a la educación de los adolescentes”.
CartaCapital