Bebé nacido a las 21 semanas es el más prematuro del mundo

Tras perder a su primera hija, nacida casi a las 18 semanas, Mollie Keen volvió a quedar embarazada. Estaba emocionada, pero también muy nerviosa. Por segunda vez en menos de dos años, en 2024, dio a luz a un bebé prematuro. Nash Keen nació a las 21 semanas, pesó 285 gramos y midió 24 centímetros. Pasó seis meses hospitalizado en Iowa (Estados Unidos) antes de que le permitieran volver a casa. A principios de este mes, el 5 de julio, celebró su primer cumpleaños y entró en el Libro Guinness de los Récords como el bebé más prematuro del mundo.

La madre, que describe a su hijo como "muy decidido, curioso y siempre sonriente", recuerda que en las "críticas primeras horas" no había certeza de que sobreviviera. "Era tan pequeño que apenas podía sentirlo sobre mi pecho. Estaba cubierto de cables y monitores, y estaba tan nerviosa... pero en el momento en que lo pusieron sobre mi pecho, todos los nervios desaparecieron. Esperé tanto tiempo ese contacto piel con piel —tres semanas para ser exactos— y sentí un alivio puro y amor a la vez", recuerda en una entrevista con Guinness .

Actualmente, con poco más de un año, Nash Keen aún no puede gatear y tiene algunas necesidades médicas. "Recibe oxígeno, está alimentado por sonda y usa audífonos para una pérdida auditiva leve. Asiste a una guardería médica especializada, donde recibe todas sus terapias. También tenemos chequeos regulares", dice Mollie Keen. "Nash no solo rompe récords, es un rompecorazones".

Esta semana, Nash Keen fue reconocido por Guinness como el bebé más prematuro del mundo. Le ganó el título por tan solo un día. El récord anterior lo ostentaba Curtis Zy-Keith Means, quien también nació el 5 de julio, pero en 2020, a las 21 semanas y un día en Estados Unidos.