La Champions, el último cromo de Mbappé

La sintonía que más pieles de gallina genera en el mundo del fútbol volverá a sonar este martes, más de tres meses después de la última vez. Lo hará primero en el Philips Arena de Eindhoven y en San Mamés, donde se disputarán los dos primeros compromisos de esta temporada, pero con el paso de los días y las semanas se acabará extendiendo a los 24 estadios que tendrán la suerte de disfrutar este curso de la mejor competición del mundo de clubs: la Champions League.
En este primer día de encuentros ya salta a escena el histórico dominador del torneo, el Real Madrid, que recibe en el Santiago Bernabéu al Olympique de Marsella. Parece un estreno cómodo para los de Xabi Alonso, que sin embargo no quiere confianzas. “Nos medimos a un rival exigente y de identidad, la gente está con muchas ganas de empezar a dar pasos”, exponía el tolosarra en la previa. El técnico tiene motivos para celebrar ya que por fin podrá contar de nuevo con Bellingham, operado del hombro el 18 de julio, y con Camavinga, que no juega desde el 23 de abril. Ambos entraron en la convocatoria.
“No le noto ansioso”, apunta Xabi Alonso de su estrella, al que sólo le falta una Champions en el palmarésCampeón de casi todo, tanto a nivel de clubs como de selecciones, la Champions le sigue siendo esquiva a Kylian Mbappé. Durante sus siete largos años en París, la orejona se convirtió en su gran obsesión, en una espina que cada vez sentía más clavada. La final de 2020, la del coronavirus, perdida frente al Bayern fue lo más cerca que estuvo. Ni abrazando a Messi y Neymar fue capaz de pegar su último cromo en el álbum. A nadie se le escapa que fue uno de los grandes motivos de apostar por el Real Madrid. “No le veo para nada ansioso, creo que como todos siente que estamos empezando un proyecto”, describía Xabi Alonso. En su primer intento, el Arsenal de Arteta le volvió a despertar. Ahora afronta su segunda aventura vestido de blanco, con los buenos resultados cosechados hasta ahora como su mejor aval para volver a soñar. “Jugar la Champions nos provoca una ilusión máxima a todos, pero es incluso más especial en el Real Madrid por la historia que tiene y aún más en el Santiago Bernabéu”, rememoraba el técnico.
Pero esa ilusión es compartida mucho más allá de Madrid. En Bilbao, por ejemplo, donde esta tarde volverán a disfrutar de la Champions once años después de la última vez. Y lo harán estrenándose ante el Arsenal, un equipo al que jamás se han medido en partido oficial. Aún sin el recién llegado Laporte ni el lesionado Nico Williams, los de Valverde confían en trasladar a Europa las buenas sensaciones ofrecidas en el tramo inicial de la Liga, un tanto empañadas, eso sí, por su último traspié ante el Alavés. También está de pega el Arsenal, que al igual que su rival ha empezado entonado la Premier, pero al que siguen asolando las lesiones. Las más destacadas siguen siendo las de Havertz y Saka, aunque en las últimas horas se ha unido a esa lista Odegaard, que se lesionó en el partido frente al Nottingham Forest.

El entreno del Villarreal
Andreu Esteban / EFEA este día de estreno en la Champions también está invitado el Villarreal, al que le toca visitar al siempre peligroso Tottenham en su estadio, al norte de Londres. Una victoria como local en sus últimos siete duelos frente a equipos españoles es el pobre bagaje de los spurs del que espera sacar provecho el equipo de Marcelino.
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