El Parlamento Europeo y la Comisión ENVI dan luz verde a los objetivos climáticos: -90% para 2040 con flexibilidad.

La Comisión de Medio Ambiente, Clima y Seguridad Alimentaria (ENVI) del Parlamento Europeo ha adoptado su posición sobre la propuesta de modificación de la Ley Europea del Clima, estableciendo un objetivo vinculante de reducción neta del 90% de las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) para 2040 en comparación con los niveles de 1990, pero con flexibilidad.

La Comisión de Medio Ambiente (ENVI) del Parlamento Europeo aprobó el mandato político para el objetivo climático de 2040 con 55 votos a favor y 32 en contra. El texto, fruto de un compromiso político entre el PPE, S&D, Renew y Los Verdes, será sometido a votación por el Parlamento Europeo el jueves 13 en la mini-sesión plenaria en Bruselas. La posición adoptada confirma el objetivo de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 90 % para 2040 (en comparación con los niveles de 1990), pero incluye una serie de flexibilidades , como el uso de hasta un 5 % de créditos de carbono internacionales de alta calidad para alcanzar el objetivo a partir de 2036, con una fase piloto entre 2031 y 2035. Poco antes de adoptar el compromiso, los eurodiputados rechazaron el informe presentado por el ponente, el eurodiputado checo Ondrej Knotek, del partido Patriotas por Europa, por 55 votos contra 33, quien propuso rechazar la propuesta completa del ejecutivo de la UE.

La Ley Europea del Clima convierte el objetivo de neutralidad climática para 2050 en un compromiso legalmente vinculante para todos los Estados miembros de la UE. Establecer un objetivo climático ambicioso para la UE en 2040 (además del objetivo ya existente de reducir las emisiones netas de gases de efecto invernadero en al menos un 55 % para 2030 con respecto a los niveles de 1990) también es fundamental para que la UE cumpla sus compromisos climáticos internacionales, que figuran en la agenda de la trigésima conferencia de las Naciones Unidas sobre el clima, la COP30, que se celebra en Belém, Brasil. Una delegación del Parlamento asistirá del 17 al 21 de noviembre.

Tras la luz verde de la Comisión ENVI, se espera que el pleno del Parlamento vote sobre la posición el 13 de noviembre. Posteriormente podrán comenzar las negociaciones (diálogos tripartitos) con los Estados miembros para finalizar la ley.

Los eurodiputados destacaron que la transición ecológica y la mejora de la competitividad de la UE deben ir de la mano. Para garantizar una consecución más rentable de estos objetivos, se han introducido diversas flexibilidades:

• Créditos internacionales de carbono: A partir de 2036, hasta un 5 % de la reducción neta de emisiones podría provenir de créditos internacionales de carbono de alta calidad procedentes de países socios (frente al 3 % propuesto inicialmente por la Comisión). No obstante, los eurodiputados exigen sólidas salvaguardias para esta medida, que se pondrá a prueba entre 2031 y 2035.
• Eliminación permanente de carbono: La eliminación permanente de carbono a nivel nacional puede utilizarse para compensar las emisiones que son difíciles de reducir en el Sistema de Comercio de Emisiones de la UE (EU ETS).
• Flexibilidad sectorial: La Comisión aprobó una mayor flexibilidad entre sectores e instrumentos para lograr los objetivos de la manera más rentable posible.

El Comité apoyó la propuesta de los Estados miembros de posponer el inicio del ETS2 (que cubre las emisiones de CO2 procedentes de la combustión de combustibles en edificios y el transporte por carretera) de 2027 a 2028 .

Para garantizar que el objetivo siga estando alineado con la ciencia y la dinámica económica, los eurodiputados instan a la Comisión a evaluar los progresos cada dos años. Esta revisión bienal tendrá en cuenta:

• Los últimos datos científicos y avances tecnológicos.
• La competitividad internacional de la UE.
• Situación de las extracciones netas a nivel de la UE.
• Tendencias en los precios de la energía y su impacto en las empresas y los hogares.

Tras esta evaluación bienal, la Comisión podrá proponer una modificación de la Ley Europea del Clima, que podría implicar también un cambio en el objetivo de 2040 o la adopción de medidas adicionales para salvaguardar la competitividad, la prosperidad y la cohesión social de la UE.