Una fuerte tormenta golpea Romaña, provocando granizo e inundaciones de carreteras.

Una repentina y potente tormenta con fuertes vientos y granizo azotó la costa de Romaña antes del amanecer, a partir de las 4:30 h, primero en las zonas de Rávena y Cervia y luego con especial intensidad en la provincia de Rímini, causando inundaciones. Se derrumbaron árboles y, en algunas zonas, las carreteras se convirtieron en ríos, interrumpiendo el tráfico. Se están realizando investigaciones para determinar si se han producido daños más graves.
Las playas y los balnearios de la zona de Cervia y Milano Marittima (Rávena) resultaron gravemente dañados por la tormenta, con fuertes vientos que azotaron la Riviera Romaña antes del amanecer. Las tumbonas se volcaron y los techos de algunas estructuras volaron o se derrumbaron. En Rímini, el Ayuntamiento, en colaboración con el concejal de Protección Civil, Yuri Magrini, describió un "evento muy grave" con 74 milímetros de lluvia. Cinco pasos subterráneos se inundaron, uno de ellos con un coche atrapado en su interior. La policía local vigila las calles aún inundadas; el agua fluye con normalidad, en parte porque ha cesado la lluvia. Los sótanos están inundados y se han caído árboles; la unidad de coordinación provincial ha activado equipos de apoyo para los bomberos.
ansa