La aterradora verdad detrás de la plaga bíblica de langostas finalmente descubierta por los científicos

Investigadores de la Universidad de Tel Aviv han desentrañado recientemente un misterio bíblico: la razón por la que las langostas forman enjambres masivos que destruyen los cultivos.
El equipo estaba particularmente interesado en qué impulsa a estos insectos, típicamente inofensivos y solitarios, a alterar drásticamente su comportamiento y a reunirse en grandes enjambres migratorios, un fenómeno que ha desconcertado a científicos y agricultores durante siglos.
Estas plagas devastadoras han estado destruyendo cultivos y causando hambrunas desde tiempos bíblicos. El Libro del Éxodo relata las langostas como la octava de diez plagas que azotaron Egipto, donde los israelitas estuvieron cautivos.
«Cubrirán la faz de la tierra de modo que no se pueda ver. Devorarán lo poco que te quede después del granizo, incluyendo todo árbol que crezca en tus campos», describe la Escritura.
Los investigadores de la Universidad de Tel Aviv descubrieron que la composición bacteriana intestinal de una langosta, conocida como microbioma, sufre cambios significativos cuando el insecto pasa a formar parte de un grupo más grande, informa el Mirror estadounidense .
Un tipo de bacteria llamada Weissella, que es casi inexistente en el microbioma de las langostas solitarias, se vuelve predominante durante la "fase gregaria" del insecto, que es cuando forman enjambre, según los hallazgos del estudio.
Los científicos utilizaron un modelo diseñado a medida para monitorear los cambios en las bacterias Weissella y descubrieron que el enjambre permitió que las bacterias se propagaran e infectaran una gran cantidad de langostas, lo que les proporcionó una clara ventaja evolutiva.
El profesor Amir Ayali, quien dirigió el estudio, afirmó: «Nuestros hallazgos no prueban inequívocamente que la bacteria Weissella sea responsable de la enjambre y la migración de las langostas. Sin embargo, los resultados sugieren una alta probabilidad de que la bacteria desempeñe un papel importante en la inducción de este comportamiento, una nueva hipótesis nunca antes propuesta».
Ayali señaló que los hallazgos del estudio podrían tener implicaciones significativas para las innumerables personas, animales y plantas de todo el mundo que aún se ven amenazadas por los brotes de langosta. "Esperamos que este nuevo conocimiento impulse el desarrollo de nuevos métodos para combatir los brotes de langosta".
Las plagas de langostas pueden causar estragos en los cultivos y provocar hambrunas. En los últimos tres años, extensas zonas de África, India y Pakistán se han visto gravemente afectadas por ellas.
Según Locust Watch, una división de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, la langosta del desierto (Schistocerca gregaria) "es la plaga migratoria más destructiva del mundo".
"Son comedores voraces que consumen su propio peso por día, y se centran en cultivos alimentarios y forrajes", afirmó.
Un solo enjambre tiene "la capacidad de consumir la misma cantidad de alimentos en un día que 35.000 personas", añadió el grupo. En 2013, un enjambre entró en Israel desde Egipto.
El estudio de la Universidad de Tel Aviv fue publicado el mes pasado en la revista científica revisada por pares, Environmental Microbiology.
Daily Express