Esto es lo que sucede cuando el reloj de tu teléfono cambia solo el 2 de noviembre.

“Adelanta en primavera, atrasa en otoño”. Ese es el truco que todos usamos para recordar lo mucho que nos cuesta el cambio de hora. Es otoño, la estación menos dolorosa, y como ahora la hora de todos los móviles cambia sola, tu alarma sonará una hora tarde. Ventaja: Puede que duermas más. Desventaja: A tu gato le dará igual la hora y te despertará a las 7:00 en vez de a las 8:00 para darle de comer. Pero si nunca te has parado a pensar en el cambio de hora y te quedas despierto hasta tarde esta noche cuando pase del horario de verano al horario estándar, esto es lo que pasará literalmente. El tiempo está ajustado ahora mismo, con el día alargado de forma antinatural para darnos más luz. En todos los lugares que adoptan el horario de verano, se coincide en que, durante los meses soleados, el mediodía astronómico —el momento en que el sol está en el cenit— es la 1:00 p. m. En otoño, esto se corrige retrasando una hora, devolviendo el mediodía a su posición correcta y ajustando la precisión de los relojes de sol. Si observas el cambio de hora en la madrugada en tu teléfono o reloj inteligente, podrás verlo literalmente. Si usas un teléfono Android, configura el reloj de la pantalla de bloqueo en modo analógico en Ajustes > Estilo . Si usas un iPhone, simplemente observa el icono de la aplicación Reloj, que es un reloj analógico completamente funcional. Según mi experiencia, el cambio de hora se produce a las 2:00:01 a. m. en los dispositivos Apple. Desconozco el motivo.

Cuando llegue el momento crucial, la manecilla pequeña retrocederá a la izquierda y tu percepción del tiempo cuantificable como una ley fija del universo se hará añicos. La verdad quedará expuesta como una construcción artificial y todo lo que consideras significativo será reemplazado por un vacío. Durante una hora, existirás en una especie de purgatorio de tiempo ajeno. No deberías estar despierto. Si alguna vez has leído «Los Langoliers» de Stephen King, sabes qué esperar en esta zona. No hay pájaros en el cielo. La comida sabe rancia. Sientes el aire en tus pulmones vacío. Las máquinas no funcionan. Bocas gigantescas y desencarnadas podrían devorarte . Lo de siempre. (Obviamente estoy bromeando. Pero lee «Los Langoliers»). Y probablemente odiarás lo que suceda esta noche: la hora que asociabas con la puesta de sol del 1 de noviembre se adelantará repentinamente una hora el 2 de noviembre, lo que significa que el día se sentirá «una hora más corto». El sol se ocultará tras el horizonte al atardecer, y de repente te sentirás como un vampiro, cenando en plena noche. Los niños pequeños, poco acostumbrados a trasnochar, sentirán que están descubriendo los secretos de la noche, porque así es. Ah, y no olvides cambiar manualmente la hora del relojito junto al velocímetro de tu coche. Es muy importante.