Vosgos. ¿Sabes qué médico de los Vosgos se envenenó deliberadamente con hongos mortales?

Permanecerá para siempre como este "médico valiente" en la memoria de los habitantes de los Vosgos que se cruzaron en su camino. Pierre Bastien, para demostrar la eficacia de su tratamiento contra la intoxicación por amanitas, no dudó en envenenarse. Arriesgó su vida ingiriendo amanitas mortales. A la comunidad médica le costó creer en su protocolo, ideado en 1957, a pesar de su éxito. Entre 1957 y 1969, se dice que salvó a unas quince personas hospitalizadas en el hospital de Remiremont, donde ejercía. En tres ocasiones, en 1971, 1974 y 1981, este médico general, residente en Remiremont, en los Vosgos, las ingirió y aplicó inmediatamente su tratamiento. La tercera vez, en Ginebra, marcó un punto de inflexión. The Lancet (una importante publicación internacional de comunicación médica), testigo del incidente, publicó y reconoció el protocolo Bastien, que fue confirmado por una tesis forense y posteriormente formalizado por la asociación médica. El Dr. Pierre Bastien relató su larga y encarnizada lucha para que su investigación fuera reconocida en su libro "Tuve que comer amanitas mortales". Según él, se podrían haber salvado otras vidas. Esta controversia fue la culpable. Murió de un infarto en 2006 a los 82 años.