«Ni diplomacia de buenos sentimientos ni diplomacia del resentimiento»: Jean-Noël Barrot responde a Bruno Retailleau sobre Argelia.

El Quai d'Orsay responde a Beauvau. En una entrevista con Le Figaro el viernes 18 de julio, el ministro del Interior, Bruno Retailleau, volvió a abordar la situación del francoargelino Boualem Sansal, encarcelado en Argelia durante más de siete meses y en el centro de una grave disputa diplomática entre París y Argel.
Al pedir la liberación del escritor, Bruno Retailleau afirmó que «la diplomacia de los buenos sentimientos ha fracasado». Boualem Sansal, condenado en apelación a cinco años de prisión , no recibió el indulto del presidente argelino Abdelmadjid Tebboune.
Estas declaraciones provocaron la reacción del ministro para Europa y de Asuntos Exteriores , Jean-Noël Barrot, en el X. "No hay diplomacia de buenos sentimientos ni diplomacia del resentimiento. Solo hay diplomacia", escribió, sin nombrar directamente a su colega.
Partidario de una "línea firme", como había confesado a France Inter , Bruno Retailleau había aguado sin embargo su vino el día del juicio en apelación del escritor, en un intento de calmar la situación.
"No quiero desperdiciar ninguna oportunidad, ni siquiera la más mínima, de lograr la liberación (de Boualem Sansal)", explicó el ministro del Interior para justificar su apaciguamiento.
Pero este último finalmente decidió volver a la ofensiva sobre la situación este viernes.
"Durante muchas semanas, guardé silencio para no obstaculizar la liberación de Boualem Sansal. Pero está claro que hoy debemos intentar algo diferente, recuperar la firmeza, centrarnos en la defensa de nuestros intereses", declaró Bruno Retailleau, afirmando que el régimen argelino "intenta humillarnos".

Además del caso de Boualem Sansal, varios otros casos están alterando las relaciones entre Argel y Francia. Un ejemplo es la situación de Christophe Gleizes , periodista independiente condenado a siete años de prisión en Argelia por "apología del terrorismo".
Otra fuente de fricción entre los países es la cuestión de los visados: en mayo pasado, las autoridades francesas anunciaron que los nacionales argelinos titulares de pasaportes diplomáticos tendrán que solicitar a partir de ahora un visado si quieren entrar en Francia.
Como prueba de la animosidad entre Francia y Argelia, ambas partes han expulsado a funcionarios al otro país en las últimas semanas. Francia también convocó al encargado de negocios argelino en París para denunciar una decisión "injustificada e injustificable" de Argel, prometiendo expulsar a su vez a los diplomáticos argelinos.
Las tensiones entre Francia y Argelia llevan a la derecha a cuestionar el acuerdo migratorio firmado por ambos países en 1968. Bruno Retailleau reiteró este viernes su deseo de "salir" de estos acuerdos .
BFM TV