Miles de manifestantes protestaron el domingo contra la islamofobia en París.

Miles de manifestantes marcharon este domingo en París, convocados por varias organizaciones y personalidades públicas, para denunciar "el aumento de la islamofobia en Francia" y rendir homenaje a Aboubakar Cissé, el joven maliense asesinado en una mezquita de la región de Gard.
"El racismo empieza por las palabras y termina como Aboubakar", proclamaba una pancarta visible en la marcha, a la que asistieron numerosos representantes de La France Insoumise, entre ellos Jean-Luc Mélenchon, Louis Boyard, Aymeric Caron, Aurélie Trouvé y Eric Coquerel, constató un periodista de la AFP.
"Con la muerte de Aboubakar Cissé , se ha cruzado una línea roja", declaró Tarek, de 44 años, director de producción de la región parisina, marchando bajo el sol con una gran bandera azul, blanca y roja.
Entre banderas francesas y palestinas, los manifestantes corearon "no, no a la islamofobia", con varias consignas y pancartas dirigidas al ministro del Interior: "Aunque Retailleau no lo quiera, aquí estamos" y "No son las mujeres con velo, no son los musulmanes, es Retailleau a quien hay que despedir".
Las organizaciones antirracistas habían convocado una marcha en la capital, donde la prefectura contabilizó 3.700 participantes y los organizadores 15.000, y en otros lugares de Francia: hubo alrededor de 400 en Lille, alrededor de 200 en Lyon según la prefectura y 150 en Marsella según los organizadores y la prefectura.
El diputado del LFI, Éric Coquerel, deploró "un aumento innegable de la islamofobia que condujo a la muerte de Aboubakar Cissé en una mezquita". "Nunca podremos insistir lo suficiente en la responsabilidad del ministro Retailleau, que está fusionando la derecha y la extrema derecha", declaró, asegurando a "nuestros compatriotas musulmanes" que "no nos rendiremos".
"La islamofobia mata, hiere, discrimina, humilla... ¡Alto!", decía una pancarta en Marsella, donde también participaron un sacerdote católico, el padre Joseph Sene, de 36 años, que "vino a apoyar a nuestros hermanos musulmanes", y un pastor protestante, Bryan Parrish, de 63 años, que cree que "podemos vivir juntos muy bien".
En los primeros tres meses del año se registró un aumento del 72% en los actos antimusulmanes en comparación con el mismo período de 2024, con 79 casos registrados, según un recuento del Ministerio del Interior.
Yassine Benyettou, secretaria nacional del colectivo RED Jeunes y coorganizadora de la marcha, deploró esta semana un "miedo constante" creciente en la comunidad musulmana, considerando que el "discurso desinhibido" de un sector de la clase política alimenta un clima antimusulmán. El asesinato de Aboubakar Cissé ha reavivado el debate en torno al término «islamofobia».
Bruno Retailleau , cuya actitud en este asunto ha sido criticada por la izquierda y por el entorno de la víctima, consideró que "hay una connotación ideológica muy marcada del término islamofobia respecto a los Hermanos Musulmanes, lo que hace que en nuestro ministerio tomemos la precaución de no utilizarlo".
Por su parte, el primer ministro François Bayrou defendió el uso del término "islamófobo" en este asunto. Este debate tuvo eco en la marcha parisina del domingo con este cartel sostenido por un manifestante: "No son islamófobos, simplemente no les gustan los musulmanes".
RMC