En Alemania, menores detenidos por agredir a solicitantes de asilo

El miércoles 21 de mayo, las autoridades alemanas detuvieron a presuntos miembros de la célula neonazi Letzte Verteidigungswelle. ¿Su particularidad? Su corta edad al momento de los hechos que se les imputan. Porque, como señala la prensa alemana, las redes de extrema derecha también están reclutando a menores en las redes sociales.
“Son jóvenes, radicales y dispuestos a luchar”. El miércoles 21 de mayo, presuntos miembros de la red neonazi Letzte Verteidigungswelle (literalmente “Última Ola de Defensa”) fueron arrestadas por las autoridades alemanas, informa Der Spiegel . Se les acusa, entre otras cosas, de haber participado en ataques contra varios centros de acogida de refugiados y solicitantes de asilo en Turingia y Brandeburgo, dos regiones del este del país.
Otros tres miembros de alto rango de Letzte Verteidigungswelle ya estaban detenidos antes de la operación del 21 de mayo. Pero la edad de los detenidos este miércoles no supera los 18 años. El más joven tiene 14 años. Y todos los sospechosos eran menores de edad en el momento de los presuntos hechos.
Para Spiegel esto no es sorprendente:
“Durante un año, el grupo de jóvenes neonazis ha estado reclutando en las redes sociales: Instagram, TikTok, Telegram”.
Y Letzte Verteidigungswelle no es el único movimiento que utiliza esta táctica. “Hay otros grupos en las redes con nombres evocadores: 'Jóvenes y Fuertes', 'Los Agitadores', 'La Juventud Alemana por Encima de Todo'.”
La detención de los miembros de Letzte Verteidigungswelle se inscribe en un contexto más amplio: el ascenso del extremismo de derecha. Esto ocurre justo el día después de la publicación de un informe que alerta sobre este fenómeno. "Las cifras presentadas el martes en Berlín son alarmantes", informa el Frankfurter Rundschau . La Oficina Federal de Policía Criminal registró un aumento de casi el 50 por ciento en los delitos relacionados con la extrema derecha, con casi 43.000 delitos.
A ello se suman los “numerosos actos que la policía no contabiliza en esta categoría” y que son perpetrados por miembros de movimientos conspirativos cercanos a círculos neonazis y nacionalistas, como los Ciudadanos del Reich (Reichsbürger, monárquicos que no reconocen las instituciones de la República Federal), o los activistas corona-escépticos del movimiento Querdenker.
Ante este fenómeno, el gobierno alemán se ha comprometido a tomar medidas. Pero el periódico de Frankfurt exige resultados rápidos. La buena noticia es que algunas personas siguen luchando con valentía contra la extrema derecha. Y les vendría muy bien un apoyo genuino de Berlín.