¿Podremos aún salvar el plátano?

FRUTAS IDEALES PARA LAS PEPITAS 1/6. En todo el mundo, el plátano más consumido es el Cavendish. Esta variedad fue un gran impulso para la industria bananera hasta que, en todos los continentes, un hongo comenzó a devastar las plantaciones una tras otra. El semanario alemán "Die Zeit" pregunta: ¿deberíamos despedirnos de esta fruta tal como la conocemos?
A las puertas de Kampala, la capital de Uganda, un guardia está sentado en una silla de plástico, con un rifle al hombro. La plantación de plátanos es vigilada día y noche. Para pasar, se necesita un permiso. Hileras y filas de plátanos crecen hasta donde alcanza la vista, como en casi todas partes en las tierras altas de África Oriental. Pero nadie puede comer estos plátanos. Los científicos han modificado su composición genética para hacerlos resistentes a las plagas. Y con estos plátanos crece la esperanza de salvar el banano.
Este campo en Kampala es un intento de contrarrestar una amenaza que, en el peor de los casos, causaría una catástrofe alimentaria mundial. Los plátanos podrían desaparecer no solo de nuestros supermercados [en Europa], sino también de los mercados de África y Latinoamérica, regiones donde son un alimento básico. Un hongo microscópico ataca las plantaciones, condenando a los bananos a la desecación y la pudrición.
Los europeos desempeñamos un papel central en esta tragedia. Porque, aunque existen más de mil variedades de plátanos, prácticamente solo comemos una. Todos los plátanos que encontramos en los supermercados alemanes son...
Courrier International