Montezemolo, de Ferrari a McLaren: el fichaje más inesperado del año en la Fórmula 1
%3Aformat(jpg)%3Aquality(99)%3Awatermark(f.elconfidencial.com%2Ffile%2Fbae%2Feea%2Ffde%2Fbaeeeafde1b3229287b0c008f7602058.png%2C0%2C275%2C1)%2Ff.elconfidencial.com%2Foriginal%2Fbda%2Fa06%2F93c%2Fbdaa0693c5bc552949c4367486bb566a.jpg&w=1280&q=100)
El fichaje de Luca Cordero di Montezemolo como nuevo director de McLaren es ese tipo de anuncios que te dejan pensativo. Si alguien ha encarnado históricamente la esencia de Ferrari, ese ha sido Montezemolo. Il Avvocato fue presidente de la compañía tras la muerte de Enzo Ferrari y, sobre todo, el principal artífice de su resurrección industrial y deportiva. Costaba imaginar su nombre ligado a otra marca, pero así ha sido y nada menos que con McLaren.
La lucha de egos y celos en la cúpula del imperio Agnelli provocó la salida de Montezemolo de Ferrari en 2014, Sin embargo, su figura, tras tres décadas de éxitos al frente de la marca, no se diluye de un día para otro. Cabe recordar que, incluso antes de su presidencia, el Commendatore lo contrató con solo 25 años, a finales de 1973, para liderar el equipo de Fórmula 1. La Scuderia vivía uno de sus peores momentos y, en apenas un año, el joven Luca la devolvió a la cima junto a Niki Lauda.
La relación de Montezemolo con la familia Agnelli se empezó a deteriorar con el fallecimiento del patriarca Gianni. Las riendas del imperio quedaban en manos de su nieto John Elkann, hijo de su hija Margherita, elegido por descarte de otras candidaturas dentro de la familia. Giovanni, su sobrino, era de lejos el sucesor más capacitado, pero falleció de cáncer muy joven. Su hijo Edoardo se suicidó y el otro nieto, Lapo Elkann aunque brillante y creativo, fue descartado por su vida desordenada y sus excesos.
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2F733%2F45e%2F56a%2F73345e56a7db032e871b50376a9e2ce8.jpg)
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2F733%2F45e%2F56a%2F73345e56a7db032e871b50376a9e2ce8.jpg)
Es posible que John Elkann no perdonara a Montezemolo al haber adoptado un rol paternal con Lapo Elkann, ayudándole a salir de sus adicciones y problemas. La verdadera causa del desencuentro, fue la guerra de poder con Sergio Marchionne. El fallecido ejecutivo italo-canadiense salvó de la quiebra al grupo FIAT y exigió que Montezemolo no gestionara Ferrari a su aire como era la costumbre. Marchionne, empezó a ejercer de jefe con alguien acostumbrado a no reportar a nadie más que a una junta de accionistas.
Un despido muy feoMontezemolo había convertido a Ferrari en una máquina impresionante de ganar dinero. Los accionistas eran conscientes de las corruptelas y tejemanejes de Montezemolo, pero siempre miraban para otro lado. Mejor no tocar lo que funcionaba y por supuesto no poner en peligro la que sería una exitosa salida a bolsa. Pero daba igual, Marchionne exigía que bajo su mando nadie fuera por libre y Montezemolo fue despedido de malas formas de Ferrari, en teoría, por la incapacidad de ganar títulos en Fórmula 1. Ver para creer.
Los fracasos deportivos tras su marcha demostraron que esa excusa solo sirvió para justificar una decisión ya tomada. La broma costó al grupo EXOR (FIAT) 27 millones de euros de indemnización, y para más ironía, acabó haciendo lo que defendía Montezemolo: desagregar a Ferrari de FIAT. Justo lo contrario de lo que proponía Marchionne. En resumen: Si aquí hay un traicionado, ese fue Montezemolo, no Ferrari.
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2F058%2F473%2Fd81%2F058473d8174d90c1ca624846f23a03ce.jpg)
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2F058%2F473%2Fd81%2F058473d8174d90c1ca624846f23a03ce.jpg)
Es verdad que Luca utilizaba a Ferrari como plataforma de proyección personal y empresarial, al estilo de Florentino Pérez en el Real Madrid. Gestionaba a su antojo las listas de espera en los coches de modelos exclusivos según sus intereses personales. Obligaba a los concesionarios a comprar mobiliario de Poltrona Frau, que casualmente, era una compañía propiedad de su fondo de inversión Charme. Y por supuesto, tenía enchufados en la compañía a los hijos de toda la élite italiana.
Pero con tejemanejes o sin ellos, la realidad es que Ferrari, bajo el mando de Montezemolo, cada año ampliaba la brecha en todos los frentes respecto a sus rivales tradicionales. Nunca quiso competir en volumen con Porsche, pero los arrasó en cuanto a exclusividad, valor residual de los coches y en competiciones de Gran Turismos, el tradicional feudo de la marca alemana. Aston Martin y Jaguar, pese a tener durante una época el respaldo de gigantes como Ford y Tata, caminaban en decadencia acelerada. Y McLaren, pese a tener buen producto, nunca terminó de convertirse en amenaza.
Un estilo únicoNo sería justo decir que Ferrari reina hoy en solitario en el lujo automovilístico únicamente por el legado de Luca Montezemolo. Pero es innegable, que los cimientos del imperio los puso él. Aston Martin fue salvada de la desaparición por Lawrence Stroll, que recurrió a antiguos hombres de confianza del italiano como Amedeo Felisa, Renato Bisignani o Marco Mattiacci. Y ahora es McLaren quien sigue esa senda. Esta vez, yendo directamente a por el jefe.
McLaren estuvo cerca de la quiebra en 2017, tras errores de Ron Dennis y sus desencuentros con Mansour Ojjeh. Mumtalakat, el fondo soberano de Baréin, asumió el control total, pero no estaba dispuesto a seguir financiando un pozo sin fondo. Con Dennis fuera, llegaron los recortes. Se vendió McLaren Applied Technologies y se separaron las divisiones Racing (competición) y Automotive (fabricación).
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2F1ac%2Ffd0%2Fe3b%2F1acfd0e3b533f40e855730b794bb4351.jpg)
La división de competición, bajo la tutela de Zak Brown, ha tenido un resurgimiento espectacular y ha atraído capital fresco de nuevos inversores. Eso sí, la división automovilística no ha habido forma de hacerla rentable. La sangría económica era tal, que la familia real de Bahrein tomó la decisión de cerrar la empresa, a menos que sus primos ricos de AbuDhabi vinieran al rescate. La propuesta llegó a la mesa de Khaldoon Al Mubarak, la cabeza pensante detrás de todas las decisiones del emirato y, resolvió adquirir la compañía a finales de 2024 a traves del vehículo inversor CYVN.
Y aquí radica el porqué de la llegada de Luca Montezemolo a McLaren. Khaldoon Al Mubarak mantiene con él una relación casi paterno filial. Los consejos de Luca, una de las mentes más brillantes del mundo en lo que respecta a dotar de valor a una marca, a su querido Khaldoon hicieron que AbuDhabi empezara a sacar la cabeza frente al emirato hermano de Dubai, que le llevaba varios años de ventaja. Con su trabajo conjunto, llegaron el parque temático Ferrari World, el Gran Premio de Fórmula 1 y otras decisiones de gran calado.
Cuando Montezemolo salió de Ferrari, Mubadala (una de las empresas más importantes de Abu Dhabi) dejó de patrocinar a la escudería. Un gesto claro de lealtad. Desde entonces, ambos han seguido en contacto. Por eso, aunque sorprendente, el anuncio de su llegada a McLaren tiene todo el sentido del mundo. La tarea que hay por delante para reflotar McLaren es titánica, pero si hay alguien capaz de hacerlo son ellos dos.
El Confidencial