Esta es la razón por la que Marte habría perdido casi toda su agua hasta secarse

Marte alguna vez tuvo mares. Las evidencias geológicas indican que el planeta rojo pudo haber albergado abundante agua en su superficie, convirtiéndolo en un mundo potencialmente habitable hace unos 3 mil millones de años. Sin embargo, con el tiempo se transformó en un planeta árido, seco y hostil.
Ahora, un estudio publicado en Nature Astronomy ofrece una nueva explicación sobre cómo Marte perdió casi toda su agua, complementando teorías previas sobre la desaparición de su atmósfera y la falta de protección magnética.
El nuevo análisis apunta a que la inclinación del eje de rotación marciano, mucho más variable en el pasado, fue un factor determinante en la pérdida acelerada de hidrógeno, uno de los componentes clave del agua.
Según el estudio, cuando la inclinación (oblicuidad) del eje de Marte era de unos 35º, el ciclo del hidrógeno se habría acelerado de forma drástica. Las simulaciones muestran que durante esos periodos, la tasa de pérdida de hidrógeno pudo aumentar más de diez veces, alcanzando cifras de hasta 6 × 10²⁷ átomos por segundo. Esto habría facilitado su escape al espacio, arrastrando con él el agua del planeta.
Actualmente, Marte tiene una inclinación de 25º, similar a la de la Tierra, lo que le permite tener estaciones. Sin embargo, en el pasado su inclinación fue mucho más inestable, haciéndolo más vulnerable al viento solar y a la pérdida atmosférica.
Hasta ahora, los científicos habían atribuido la pérdida de agua en Marte principalmente a la ausencia de un campo magnético global y a la falta de vulcanismo activo, dos factores que en la Tierra ayudan a mantener una atmósfera estable.
Sin un escudo magnético, los vientos solares “rasuran” la atmósfera, expulsando gases esenciales como el oxígeno. Y sin volcanes activos que repongan esos gases, el planeta no puede mantener un equilibrio atmosférico a largo plazo.
El nuevo estudio no descarta estas causas, pero las complementa con la hipótesis de la oblicuidad, señalando que la dinámica axial del planeta también habría jugado un rol crucial en su transformación de un mundo húmedo a un desierto congelado.
La Verdad Yucatán