El Departamento de Salud y Servicios Humanos de RFK Jr. ordena a un laboratorio que estudia enfermedades infecciosas mortales que detenga sus investigaciones

El Departamento de Salud y Servicios Humanos de la administración Trump ha ordenado a un centro de investigación de los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos que se encarga de estudiar el ébola y otras enfermedades infecciosas mortales que detenga sus actividades de investigación.
Según un correo electrónico consultado por WIRED, se le indicó al Centro de Investigación Integrada de Frederick, Maryland, que suspendiera todos los trabajos experimentales antes de las 17:00 del 29 de abril. El centro forma parte del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas (NIAID) y está ubicado en la base militar estadounidense de Fort Detrick. Realiza investigaciones sobre el tratamiento y la prevención de enfermedades infecciosas consideradas de "alta consecuencia", es decir, aquellas que representan riesgos significativos para la salud pública. Cuenta con 168 empleados, incluyendo personal federal y contratistas.
El correo electrónico, enviado por Michael Holbrook, director asociado de alta contención en el Centro de Investigación Integrada, indica que el laboratorio está cancelando los estudios sobre la fiebre de Lassa, el SARS-CoV-2 y la encefalitis equina del este (EEE), una enfermedad rara pero letal transmitida por mosquitos que se ha reportado en varios estados del norte de EE. UU. "Estamos recolectando tantas muestras como sea razonable para garantizar que estos estudios sean valiosos", afirma en el correo electrónico. "No se nos ha solicitado la eutanasia de ningún animal, por lo que estos animales continuarán siendo controlados". Holbrook no respondió a una consulta de WIRED.
El correo electrónico indica que representantes del Departamento de Seguridad Nacional estaban cerrando con candado los congeladores de los laboratorios de nivel de bioseguridad 4, aquellos con el mayor nivel de contención de bioseguridad, utilizados para el estudio de microbios altamente peligrosos. Solo existen alrededor de una docena de laboratorios de nivel de bioseguridad 4 en Norteamérica. Estos laboratorios trabajan con los virus que causan el ébola, la fiebre de Lassa y la fiebre de Marburgo, dos tipos de fiebres hemorrágicas. El Centro de Investigación Integrada es uno de los pocos lugares del mundo que puede realizar imágenes médicas en animales infectados con agentes de nivel de bioseguridad 4.
“El sacrificio para la investigación es inmenso”, afirma Gigi Kwik Gronvall, investigadora principal del Centro para la Seguridad Sanitaria de Johns Hopkins, sobre el cierre. “Si las cosas no se utilizan durante un tiempo, costará más dinero prepararlas para su uso posterior”.
La directora del centro, Connie Schmaljohn, también ha sido suspendida de empleo, según el correo electrónico. Anteriormente, Schmaljohn se desempeñó como investigadora científica sénior en el Instituto de Investigación Médica de Enfermedades Infecciosas del Ejército de EE. UU. Cuenta con más de 200 publicaciones de investigación y su trabajo ha dado lugar a varios ensayos clínicos de vacunas pioneras. Schmaljohn tampoco respondió a una consulta de WIRED.
En una declaración enviada por correo electrónico a WIRED, Bradley Moss, director de comunicación de la oficina de servicios de investigación de los NIH, confirmó la suspensión de las investigaciones. «Los NIH han implementado una pausa en las investigaciones —denominada suspensión de actividades de seguridad— en el Centro de Investigación Integrada de Fort Detrick. Esta decisión se produce tras la identificación y documentación de problemas de personal relacionados con el personal contratado que comprometieron la cultura de seguridad del centro, lo que motivó esta pausa en las investigaciones. Durante la suspensión, no se realizará ninguna investigación y el acceso se limitará únicamente al personal esencial para proteger el centro y sus recursos».
Moss no dio más detalles sobre la naturaleza de los problemas de personal y afirmó desconocer la duración de la pausa en la investigación. El personal no ha recibido una fecha prevista de reapertura.
La pausa en la investigación es la última interrupción en las agencias científicas federales después de que el secretario del HHS, Robert F. Kennedy Jr.,anunciara a finales de marzo que 10,000 personas de la vasta agencia federal de salud perderían sus empleos, incluyendo a quienes trabajan en los Institutos Nacionales de Salud (NIH), la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) y los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC). Los despidos masivos forman parte de un plan de reestructuración que está llevando a cabo el llamado Departamento de Eficiencia Gubernamental del presidente Donald Trump.
wired