Audemars Piguet lleva la tendencia del color al extremo con estos tres modelos de relojes

Audemars Piguet lanza tres nuevos modelos de 38 mm de la colección Code 11.59 by Audemars Piguet con esferas de piedras naturales de colores.

Las esferas coloridas ya no son un fenómeno marginal. Ya sean tonos verdes exuberantes, azules intensos o rojos cálidos, cada vez más marcas de relojes abandonan la moderación y dan vida al color. La emoción se intensifica cuando los matices se combinan con materiales que aportan profundidad y estructura. Aquí es precisamente donde entra Audemars Piguet : con tres nuevos modelos de la colección Code 11.59 by Audemars Piguet, cuyas esferas están elaboradas con gemas auténticas con sus vetas individuales, la tendencia del color adquiere una nueva y sorprendente dimensión.

Las esferas coloridas han sido un elemento básico en el mundo de la relojería desde hace varios años; sin embargo, los colores suelen crearse mediante laca, recubrimientos galvánicos o superficies esmaltadas. El nuevo Code 11.59 de Audemars Piguet Flying Tourbillon Automatic de 38 milímetros adopta un enfoque diferente: sus esferas están hechas de piedras naturales de corte finísimo, cuyos granos individuales hacen que cada reloj sea único.

La idea no es del todo nueva: el relojero suizo ya experimentaba con esferas de piedra en la década de 1960. Para su 150.º aniversario, la manufactura continúa esta tradición. La raíz de rubí de Tanzania, la sodalita de Brasil y la malaquita de Zambia no solo aportan colores vibrantes , sino también una profundidad y una estructura inalcanzables con las técnicas convencionales. Los materiales de la caja se seleccionaron para resaltar la singularidad de cada piedra: oro blanco de 18 quilates para la raíz de rubí roja, oro rosa de 18 quilates para la sodalita azul y oro amarillo de 18 quilates para la malaquita verde.