Me gasté 163.000 euros en un evento por equipos y no me arrepiento ni un céntimo

El fundador de 27 años, Jason Modemann, tiene 150 empleados e invierte 163.000 euros en un evento de equipo. ¿Por qué?

Jason Modemann es el fundador y director general de la agencia de redes sociales Mawave Marketing. A sus 27 años, gestiona 150 empleados. Entre los clientes de Mawave se encuentran Red Bull, Nike y Lidl.

Dos semanas después de nuestra reunión anual de equipo, sigo exhausto. En el mejor sentido de la palabra. Durante dos días, tres cuartas partes de la empresa nos regalamos un descanso. Lejos de la rutina, en un entorno idílico. Esto incluyó talleres, copas al sol, una fogata con guitarra y pan de palo, olimpiadas por equipos y chapuzones en el lago.

Después, me preguntaban con frecuencia: ¿Por qué hacen esto? ¿Por qué dejan a todo el equipo fuera de servicio durante dos días e invierten en un evento que, en teoría, no tiene un retorno directo de la inversión? Al fin y al cabo, gastamos 38.000 € solo en la ubicación y otros gastos. Y si hubiéramos vendido la misma cantidad de tiempo a nuestros clientes, probablemente habríamos generado unos ingresos de 125.000 €.

Es más probable que me pregunte: ¿Por qué no hacen esto más empresas? Para mí, es lo mejor que podemos hacer por nuestro equipo. Por tres razones:

Es cierto que fomentar el espíritu de equipo siempre suena un poco a escalada o a ejercicio de confianza, pero es absolutamente esencial para nuestro crecimiento. Cuando 109 personas se reúnen por la noche, charlan en privado o se conocen por primera vez mientras nadan fuera de las llamadas, ocurre algo que apenas tiene cabida en el ritmo frenético de la vida diaria. La confianza crece. La cercanía se desarrolla.

Y esto es precisamente lo que está cambiando la colaboración en el día a día: los equipos que se conocen personalmente pueden resolver conflictos con mayor rapidez e interactuar con mayor franqueza. Comprenden mejor las fortalezas y debilidades de sus compañeros y saben cómo comunicarse. Esto supone un cambio radical, especialmente para empresas como la nuestra, donde muchos empleados también teletrabajan o no pueden estar en la oficina con regularidad.

Medimos nuestro eNPS, o satisfacción del equipo, cada dos semanas. Una de las preguntas que hacemos en esta encuesta es: "¿Recomendaría Mawave como lugar de trabajo?". Lo que observamos constantemente es que esta puntuación mejora significativamente después de un evento como nuestro retiro; este año, por ejemplo, en casi 15 puntos porcentuales, de 35,2 a 50. En una escala del 1 al 10, actualmente tenemos una respuesta promedio de 8,38.

Esto se debe a que los empleados se sienten parte de algo más grande. Que pertenecen. Esta experiencia les da un impulso de motivación y refuerza su compromiso de contribuir a la empresa a largo plazo. Y lo mejor de todo, trasladan esta sensación positiva a su vida diaria, lo que repercute inmediatamente en la cultura y el ambiente general de la empresa.

Al principio, suena paradójico: ¿retiramos al equipo dos días completos para que sean más productivos después? Sí. Porque eso es exactamente lo que ocurre. Las personas que se respetan y se conocen mejor trabajan juntas con mayor fluidez y de forma más orientada a las soluciones, en todos los departamentos, ubicaciones y roles.

En resumen: Como fundador, a veces tienes que invertir en cosas sostenibles que no generan ingresos ni reducen costes de inmediato. Y para quienes aún buscan cifras tangibles: los estudios demuestran que una nueva contratación cuesta una media de 10.000 €. Así que una baja tasa de abandono, fruto del espíritu de equipo, la satisfacción y una mayor eficacia, compensa a largo plazo, ¿verdad?